HHH Campeon justo o desmerecido?

Viendo la pagina de wrestlingdom.com, vi este dialogo que realmente me parecio interesante aunque no aclarase nada.. aunque ya veo que no soy el unico que piensa que HHH quiere alcanzar a Flair, pues realmente se lo merece desde mi punto de vista:

Día lunes. Un café, una mesa, un bar en general son el contexto para una charla de amigos. Los chicos, en su reunión habitual, comentan sobre lo que más les importa. Temas en general son comentados. De repente, la conversación vuelca en No Mercy. Lucha a lucha, es la crítica en general. Todo iba derecho, hasta que se topan con lo torcido de la discusión. La curva de la opinión opuesta se presenta en Triple H contra Jeff.

Mariano estaba indignado con lo que había pasado. Aclarando más su situación… estaba aburrido. No podía creer la chatura del interlineado de la historia. “¿Quién escribe eso? ¿Él?” Decía.

Adrián totalmente opuesto, sonreía conforme. “A mi me pareció que estuvo re bien”. “¿Qué otra cosa se podía hacer?”

Mariano objetaba que esa no era la manera, esa forma era humillante.

La conversación se tornó un poco más profunda que el simple comentario al aire. Textualmente, cada uno empezó a abrir un poco más la idea, hasta llegar a las raíces mismas de la cuestión (o quizás eso era lo que ellos pensaban).

Mariano: "¿Vos crees que eso era lo que tenía que pasar? Si es así, a mi esto me aburre. No creo que sea lo más beneficioso para nadie. Yo no lo hubiera hecho así; o por lo menos eso no era lo que quería ver como espectador".

Adrián: "Triple H se lo merece. ¿A quién se lo van a dar? No tiene a nadie. Son todos malos, o tienen problemas".

Mariano: "Son talentos jóvenes. Triple H ya tiene que pasar la posta, o aparentar pasarla. No pude aplastar a todos sin excepción. Es aburridísimo eso. Aplasta a todos en el show y después no queda nada para el PPV. Todos sabemos que va ganar".

Adrián: "Esta vez fue una buena lucha, Jeff estuvo bastante bien, pero no se lo tenían que dar a él".

Mariano: "Durante el combate Jeff me convenció, merece ser campeón. Triple H tiene que dejar ese título. Es súper evidente que el que manda es él, se arma todo. Me gustaría saber cuál es el límite de su ego".

Adrián: "¿Ahora vas a caer en eso de que es el yerno?"

Mariano: "No se. Quizás sea eso sumado a otras cosas. Hay tipos que llegan al poder absoluto de otras formas".

Adrián: "Lo mismo de nuevo. Triple H jobbeó durante 4 años. Le dieron el título antes de estar casado con Steph. El tipo se lo merece, dio los mejores combates".

La charla se transportó a otra situación. Estaban los dos, tirados en unos sillones, en algún living, poniendo play a lo que es “The King of Kings”.

El repaso por las luchas de Triple H intentaba convencerlos a ambos de algo, o reafirmar posturas. Los dos miraban atentos, queriendo cambiar la visión del otro.

“Con esto no hacemos nada”, dijo Mariano.
“Sí, fíjate que buenas luchas. Mirá todo lo que hizo, el tipo se merece esto que hace ahora”. Retrucó Adrián.

Mariano: "No, está bien que allá pagado derecho de piso 4 años, todos lo hacen. Está bien que allá dado algunos de los mejores combates de esos años, pero eso no justifica nada. No se puede vivir del pasado. Haber hecho lo mejor, no te da derecho a hacer lo que quieras ahora. Es por uno mismo. Arruina todo".

Adrián: "Yo al tipo lo banco, me parece un genio, me hizo disfrutar mucho".

Mariano: “Creo que hay que saber diferenciar las cosas. Uno puede ser un genio, pero llega una parte en que tiene que renovar el stock, porque el pasado te condena, te exige. Uno no se tiene que creer el mejor por lo que hizo, sino por lo que hace. De no ser así, te transformas en algo tipo Charly García. Era un genio, y ahora pasó a ser un boludo. Pretende que todos crean que es el mejor, cuando en realidad ya no lo es. Con Maradona pasa más o menos lo mismo. Quizás con Triple H igual. Hay que mirar el presente”.

Adrián: “Puede ser”.

Mariano: “No sé cual es su objetivo. Quizás sea alcanzar a Flair. Si realmente es eso, que ya largue el título y que lo retome dentro de unos meses. Eso ayudaría para sumar a la cuenta… Pero que lo entregue YA..”

Adrián: “Ja, ja… ¿tanto por el título?”.

Mariano: “El cinturón no importa. Ser campeón te garantiza 20 minutos de lucha cada tanto. Quiero ver a otro ocupar esos minutos”.

Adrián: “¿A quién es la pregunta?”

Mariano: “Fijate la lucha con Jeff. No hay finishers que le hagan efecto. Swanton Bomb!!! Y nada… ¡cualquiera! La lucha esa era para entregar el título. Jeff estuvo re bien. Vos decís, ‘ahora se lo da’… pero no… ¿Cómo sigue todo esto?”

Adrián: “Es un gran problema, prácticamente Jeff está descartado. Triple H le ganó limpio”.

Mariano: “Debería haber entrado alguien, Kozlov quizás, o ganar por DQ… pero no limpiamente. Le quitó toda la credibilidad a Hardy”.

Adrián: “Habrá que inventar otro oponente, alguno que se lo merezca”.

Mariano: “Es que no hay nadie. Triple H ya acabó con todos”.

La frase conjunta “¡Que quilombo!”, coincidía con la imagen de Triple H levantando el título, mientras escupía agua mineral a lo bruto sobre su mismo rostro.

No he corregido el acento argentino para que conserve su originalidad.